La inversión en ‘real estate’ encara la recuperación: rebote del 32% en 2021
El capital invertido en el sector inmobiliario español alcanzará 11.500 millones de euros en España si se logra la inmunidad de rebaño en el tercer trimestre del año, según Deloitte.
8 mar 2021 - 04:57
El real estate, a por la remontada. La inversión en el sector inmobiliario en España rebotará un 32% este año, por lo que alcanzará 11.500 millones de euros y volverá a niveles prepandemia, asumiendo que se alcance la inmunidad de rebaño en el tercer trimestre del año, según el informe Real Estate Investment & Financing Keys realizado por Deloitte.
En 2020, la inversión en el inmobiliario español fue de 8.700 millones de euros, lo que supone una caída del 52% respecto a 2019. El mayor descenso se produjo en hoteles, donde la inversión se recortó un 62%, seguido de las oficinas, el segmento que más inversión acumula, pero que anotó una caída del 49%. Pese al auge del ecommerce, el logístico redujo su inversión un 26%, mientras que el retail, uno de los segmentos más golpeados por la pandemia, finalizó el año con una caída del 23%, debido a grandes operaciones como la venta de Puerto Venecia.
“Percibimos sectores afectados estructuralmente por la nueva transformación social, como las oficinas, retail, u hoteles urbanos orientados a negocios, y sectores afectados coyunturalmente donde esperamos volver a retornos pre Covid-19 en un plazo corto, de uno o dos años”, explica Alberto Valls, socio responsable de real estate en Europa, Oriente Próximo y África (Emea, por sus siglas en inglés) de Deloitte.
Las socimis fueron las que más recortaron su inversión inmobiliaria en España en 2020
En España, todos los actores redujeron su inversión en 2020. El que más recortó su actividad en el inmobiliario fueron los inversores institucionales y las socimis, con un descenso del 79%. La inversión cross-boreder se contrajo un 43%, mientras que la inversión privada cayó un 38%. Por tipo de activo, los players prefirieron inversiones seguras y los activos core+ y core anotaron un aumento de inversión del 8% y el 6%, respectivamente. Mientras que las inversiones value add se contrajeron un 14%.
En Europa, España se ubica como la sexta economía en volumen de inversión, por encima de Italia, donde el inmobiliario copó 8.400 millones de euros de inversión. El primer puesto del ranking lo ocupa Alemania, donde el real estate levantó 58.600 millones de euros. Le siguen Reino Unido, con 44.400 millones de euros, y Francia, con 33.000 millones de euros.
Entre las diez mayores economías del inmobiliario europeo, España registra la mayor caída de inversión, seguido de Italia, con una caída del 32%. Sólo dos países superaron la inversión de 2019: Noruega, con un aumento del 15%, y Suiza, con un incremento del 36%.
Más allá de la caída en el volumen de inversión, la pandemia ha dejado cambios estructurales en el mercado español. La incertidumbre provocada por la caída de contratación de oficinas puede hacer peligrar sus volúmenes de inversión, sobre todo en las zonas secundarias. En el retail, los cambios en el comportamiento del consumidor y la penetración del ecommerce van a impactar en el diseño tanto de los centros comerciales como en el de los ejes high street.
La logística vive su momento más dulce con el aumento de la demanda provocada por el auge del ecommerce, si bien los centros logísticos deberán adaptarse y construir instalaciones especializadas en el comercio online.
Teniendo en cuenta el nuevo escenario tras el Covid-19, Deloitte señala activos value add como los data center, el build-to-rent, la logística y los resorts, junto a otros más maduros como la logística y el residencial, como los segmentos que se recuperarán más rápidamente.
Los fondos europeos Next Generation también jugarán su papel en el real estate español post Covid-19 español. “El efecto multiplicador del sector inmobiliario es uno de los más relevantes entre las distintas ramas de actividad, fluctuando entre el 1.7x y el 2.4x, por lo que estimamos que sea uno de los sectores protagonistas dentro de la iniciativa Next Generation”, sostiene Joaquín Linares, socio de Financial Advisory de Deloitte.
España registró la mayor caída de inversión inmobiliaria en Europa
En el conjunto de Emea, la inversión en el sector inmobiliario fue de 239.000 millones de euros en 2020, lo que supone una caída del 23%. Por su parte, en el continente americano registró un descenso del 35%, hasta 351.000 millones de euros y la región de Asia-Pacífico anotó la menor caída con un descenso del 16%, hasta 136.000 millones de euros. A escala global, la inversión en real estate se recortó un 30% en 2020 y el sector hotelero ha protagonizado la mayor caída, con un descenso del 61%.
“Nos enfrentamos a un nuevo ciclo económico expansivo y con una recuperación pronunciada en un entorno de tipos de interés bajo”, apunta Valls. “Esto hace que el inmobiliario sea uno de los mercados más beneficiados para atraer inversión, dado el amplio diferencial que ofrece sobre la inflación, eso sí, siempre manteniendo políticas monetarias y fiscales expansivas e inflaciones moderadas”, añade.
En concreto, en el Viejo Continente se invirtieron 228.000 millones de euros, un 22% menos que en 2019. El sector hotelero registró la mayor caída en volumen de inversión también en Europa. Se destinaron al segmento 9.000 millones de euros, un 65% menos que en 2019.
Le sigue oficinas, donde la inversión se contrajo un 32%; retail, con una caída del 14%, y residencial, donde bajó un 13%. Por el contrario, el logístico se presentó como el ganador de la pandemia con un incremento del 6%. Las socimis aumentaron su inversión un 1%, hasta 16.000 millones, mientras que el capital institucional, cross-border y privado recortó su actividad con descensos del 25%, 24% y el 15%.