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Renta se aleja de su previsión de beneficio al reducir ingresos en el primer semestre

La inmobiliaria admite en sus resultados semestrales que está intentando renegociar la deuda a corto, que se eleva a 33 millones de euros, aunque recuerda que dispone de 45,6 millones provenientes de la última emisión de bonos en el Marf.

Abel Pujol

26 jul 2023 - 05:00

Renta se aleja de su previsión de beneficio al desplomar ingresos en el primer semestre

 

 

Renta Corporación se aleja de las previsiones de principio de año. La inmobiliaria ha anotado un resultado negativo de 3,3 millones de euros en el primer semestre del año como consecuencia de la caída de sus ingresos, que se han situado en 30,6 millones de euros, un 25% por debajo de la facturación registrada en la primera mitad de 2022.

 

En un comunicado, la compañía justificaba estos números por “las condiciones macroeconómicas y geopolíticas, la inflación persistente y las reiteradas subidas en los tipos de interés, así como el incremento del precio de las materias primas”. “Todo ello ha conllevado un retraso en las decisiones de inversión, así como un desplome de las transacciones y del volumen de las mismas, impactando directamente en el margen de las operaciones del grupo y en el resultado del período”, señalaba Renta.

 

La inmobiliaria presidida por Luis Hernández de Cabanyes y dirigida por David Vila apuntó en la junta general de accionistas de la compañía, celebrada a finales del pasado marzo, que su previsión a cierre de 2023 pasaba por anotar un resultado neto positivo de entorno a los 7,7 millones de euros. En este sentido, Renta decidió suprimir el dividendo con cargo a los resultados del 2022 para destinar el máximo de recursos a su crecimiento.

 

 

 

 

Con los datos del primer semestre del año en la mano, se antoja difícil que la inmobiliaria pueda remontar sus números para alcanzar el objetivo de beneficios, y más teniendo en cuenta que la deuda a corto plazo de la compañía se eleva a 33 millones de euros, de un total de 45,4 millones de euros. En este sentido, la inmobiliaria admite en sus resultados semestrales que está intentando renegociar la deuda a corto, aunque recuerda que dispone de 45,6 millones provenientes de la última emisión de bonos en el Marf.

 

Respecto a las existencias, Renta Corporación sumaba 29,1 millones de euros a cierre del primer semestre, lo que supone 23,7 millones de euros menos en comparación a las de cierre del 2022. Esto se explica por la venta mediante dación en pago de un suelo residencial de Canoves, con un valor en existencias de 18,1 millones de euros y la venta parcial de una promoción residencial en la calle Herzegovina, además de una parte de un edificio en la calle Carrera y otro en la calle Camèlies, en Barcelona, y parte de un edificio en la calle Nuestra Señora de la Soledad de Madrid.

 

Teniendo en cuenta que las perspectivas que maneja el sector sitúan la recuperación del mercado transaccional a mediados de 2024, el empujón en el resultado neto de Renta debería venir de la parte del negocio patrimonial, segmento en el que la compañía ha decidido apostar en los últimos ejercicios mediante la creación Cabe, compañía de alquiler de trasteros urbanos, y Wellder, socimi creada junto al fondo de pensiones holandés APG y especializada en el sector sociosanitario y centros de tercera edad.

 

 

 

 

En los primeros seis meses del año, Wellder ya ha adquirido su primer activo, una residencia de la tercera edad ubicada en Burgos por la que la socimi pagó 7,5 millones de euros. La alianza entre Renta y APG contempla una inversión de 250 millones de euros en la adquisición de activos residenciales para seniors en el mercado español, aunque la inmobiliaria española sólo controla el 3% de las participaciones, por lo que, hasta que la cartera de Wellder no empiece a engordarse, los ingresos provenientes de esta línea de negocio no tienen vises de tener un impacto positivo notable en la cifra de negocio de Renta a corto plazo.

 

La otra pata del negocio patrimonial en la que ha confiado la inmobiliaria es el alquiler de trasteros. Mediante el vehículo Cabe, Renta ha adquirido desde finales de 2021 un total de once locales ubicados en Barcelona y Madrid, con un valor de mercado de 17,6 millones de euros. Además, según consta en los resultados, a cierre del primer semestre Cabe cuenta con una cartera de inversión en estudio de 4,2 millones de euros, compuesta por doce activos ubicados, además de en Barcelona y Madrid, en Zaragoza y Palma.

 

En la junta de accionistas de marzo, los responsables de Renta ya informaron que, para aumentar la actividad de Cabe, la compañía daría entrada este año a un socio, principalmente financiero. La inmobiliaria no informa en las cuentas semestrales de la entrada de ningún socio para la filial de trasteros, por lo que la operación debería trasladarse al segundo semestre del año. Faltará por ver si la presumible entrada de este socio servirá para impulsar suficientemente la facturación de Renta, lo que le permitiría alcanzar los casi ocho millones de euros previstos de beneficio en 2023.