Directores de tecnología y sostenibilidad, los perfiles más buscados en el inmobiliario

El real estate necesita nuevos profesionales. Para este 2025, se prevé que el sector experimentará algunos cambios significativos, especialmente en relación a perfiles especializados en tecnología, sostenibilidad y nuevas dinámicas de mercado laboral. Beatriz Calvo, senior partner de real estate en LHH Executive Search (Grupo Adecco) explica que “algunas de las posiciones más demandadas en inmobiliario podrían ser responsable de sostenibilidad (Chief Sustainability Officer), de tecnología (Chief Technology Officer), gerente de experiencia de cliente, director de operaciones (Chief Operations Officer) y analista de data, además de director de desarrollo de negocio, gerente de proyectos de construcción y expertos en compliance y regulación”.

Calvo apunta que “estas nuevas demandas reflejan la evolución del sector y determinan que tecnología, sostenibilidad y experiencia del cliente tendrán un papel crucial en el futuro del real estate”. También remarca que la figura del CSO comienza a darse en el sector, pero de forma no demasiado notable, ya que “por ahora las áreas de ESG suelen estar todavía compartidas entre dos o tres equipos de la compañía”.      

Por segmentos, el residencial está empezando a exigir cada vez profesionales “con habilidades más sofisticadas y una visión de negocio más amplia”. Calvo detalla que la falta de suelo para poner viviendas en producción ha hecho que muchas compañías, como las promotoras, acudan a nuevos modelos de negocio como el flex living o el senior living, por lo que demandan ejecutivos con experiencia en real estate, “pero también valoramos experiencia en otros sectores y mercados, ya que es necesario incorporar talento más versátil”, aclara.

En cuanto a habilidades específicas, Calvo pone el foco en la vertiente tecnológica. La experta indica que “en los últimos años, el sector está viviendo una transformación digital, por lo que necesita a personas que acompañen a las empresas en sus transiciones, especialmente en materia de plataformas, ciberseguridad, data e inteligencia artificial”. Según ella, la IA ya se está empezando a usar tanto para realizar valoraciones de suelo como para desarrollar agentes conversacionales que desempeñen tareas de atención al cliente y postventa.     

Beatriz Calvo (LHH Executive Search) pone el foco en la vertiente tecnológica del sector

Al preguntarle si la inteligencia artificial puede ayudar o jugar en contra de los profesionales, la senior partner de LHH apunta que “mal empleada, puede jugar malas pasadas, en cuanto a interpretaciones basadas en modelos que se alejen de la realidad”. Y agrega que, al igual que en otros sectores, es un área sobre la que se van a necesitar ciertos conocimientos, “sobre todo en la parte de suelo”. En la construcción, la IA tiene mucho peso en todo lo relacionado con la industrialización de la vivienda.

Por ello, las empresas de construcción, en el ámbito directivo, requieren de profesionales con conocimientos actualizados. Calvo recuerda que la construcción “siempre ha sido vista como un sector muy conservador”, pero actualmente uno de los tipos de perfiles más demandados “apunta a la experiencia internacional de los directivos, con atención a la eficiencia operativa”. Así, la industrialización de viviendas “es una tendencia que cada vez cobra más importancia, porque permite a las empresas anticiparse, y requiere talento directivo con mucha experiencia en industria y optimización de procesos, entre otras habilidades”. Y remata diciendo que “si hablamos de otras tendencias en materia de empleo, a nivel de operarios de construcción (como por ejemplo los encofradores), presenciaremos problemas de demanda en breve, porque no hay candidatos interesados”.

Los encargados de obra, que no tienen estudios universitarios, han llegado a cobrar más que algunos arquitectos, según algunos informes. Al preguntarle a la socia de LHH por esto, responde que “los sueldos no son ni justos ni injustos, sino que dependen de la oferta y la demanda, al igual que de los márgenes resultantes de los negocios”. Aclara que, en el caso de los jefes de obra (y algunos otros perfiles en sectores más tecnológicos, por ejemplo), “responde simplemente al hecho de que esta es la única manera de atraer y retener talento”, si bien considera que estas son motivaciones “muy cortoplacistas” porque hay niveles de rotación muy altos. Y remata afirmando que “el sector está muy ‘inflacionado’ para este tipo de posiciones, altamente demandadas”, así que cobran por encima de precios de mercado.

La industrialización de viviendas cobra más importancia cada vez

Respecto a la falta de relevo generacional en la construcción, muchas empresas ya se están planteando empezar a incluir sus propios modelos de formación dentro de la organización y “crear escuelas especializadas donde, además de enseñarte un oficio, tengan la capacidad de integrarte en la empresa”, como se hacía en el pasado, por ejemplo, en el sector de la alimentación perecedera: carnicería y pescadería. Por tanto, “las grandes empresas están apostando cada vez más por formar de manera interna y ofrecer empleabilidad dentro de la corporación, para asegurar una estabilidad laboral”. Y, además, aprovechan las características de la industrialización “para tomar medidas que les permitan necesitar menos mano de obra a largo plazo”, en palabras de Calvo.

Precisamente en relación a la carencia de profesionales formados para la construcción, la cazatalentos señala que la formación profesional (FP) en España históricamente no ha sido tan bien considerada debido a “una cuestión cultural y clasista” y señala que eso ha causado que no existiera la exigencia debida “ni se haya puesto en valor a este tipo de profesionales”. No obstante, Calvo indica que aún hay tendencia a animar a los estudiantes a estudiar carreras universitarias cuando “pueden tener problemas, debido a las crisis de empleo en diversas áreas”. Y remata sugiriendo que habría que dar más valor a la FP, como se hace desde otras visiones internacionales, que “no solo aplauden la labor de los gestores (con estudios universitarios), sino también la de los expertos y especialistas (provenientes de FP)”.