Mercado

Capacidad eléctrica, conexión a nodos y talento: la santísima trinidad para el terreno del ‘data center’

El mercado de centros de datos está viviendo un momento dulce en España y los inversores ya rastrean terrenos donde desarrollar nuevos activos. El hecho que los centros tengan que cumplir exigentes demandas energéticas y técnicas restringe la búsqueda.

Abel Pujol

5 may 2022 - 04:56

Capacidad eléctrica, conexión a nodos y talento: la santísima trinidad para el terreno del ‘data center’

 

 

¿Dónde instalar un centro de datos en España? El mercado del data center coge velocidad de crucero en paralelo al anuncio de grandes inversiones por parte de compañías como Merlin o Thor, además de empresas especializadas, como Ingenostrum, que prevé invertir 1.300 millones de euros en levantar en Extremadura el primer centro de datos neutro en carbono de la Unión Europea.

 

El creciente interés del capital nacional y extranjero por el mercado de los centros de datos hace aflorar la pregunta de en qué parte de España es más atractivo instalar esta clase de activos. A parte de la superficie (un terreno para data center tiene que contar con más de 10.000 metros cuadrados) hay otras especificidades que tiene que cumplir un suelo para ser atractivo a ojos del inversor.

 

Potencial de generación y almacenamiento eléctrico, cercanía a las grandes redes de nodos de datos, disponibilidad de suelo industrial y, muy especialmente, capacidad para atraer perfiles profesionales específicos de su área de influencia. Estos son los condicionantes que tipifica José Friebel, miembro de la junta directiva de Spain DC, patronal del vertical en España, y director general para España y Latinoamérica del portal especializado DataCenter Dynamics, con sede central en Londres y medio referencia del sector a escala global.

 

“Hay otros aspectos importantes, como que el clima sea benigno, que no se registre actividad sísmica, que el terreno cuente con buenas comunicaciones terrestres para favorecer la operativa de construcción y mantenimiento y, por último, que haya una apuesta de las administraciones locales por este tipo de activos”, apunta Friebel, a EjePrime.

 

El próximo 25 y 26 de mayo, DataCenter Dynamics organiza el evento DCD>Connect Madrid en el hotel Riu Plaza España de Madrid para que profesionales del sector del Sur de Europa e inversores interesados en el vertical puedan intercambiar experiencias y reflexionar sobre el momento y hacia donde se dirige el sector. La localización de los mejores terrenos para instalar un centro de datos en España será una de los temas que, seguro, estará sobre la mesa.

 

 

 

 

Respecto a la capacidad eléctrica, el directivo apunta que el sector ha hecho una apuesta decidida para que su elevada demanda eléctrica provenga en su gran mayoría de fuentes renovables, pero también subraya la enorme importancia que el terreno esté cerca de una subestación eléctrica con capacidad para asumir las necesidades del activo.

 

A finales de 2021, según los datos de Red Eléctrica Española, la oferta disponible en las subestaciones en todo el país era de 11,5 gigavatios (GW), una cifra que no cubría ni un 8% de la demanda para conexión de parques de energías renovables, que alcanzaba 147 GW.

 

Galicia (2.989 MW); País Vasco (1.929 MW); Asturias (1.240 MW) y Cataluña (1.195 MW) son las regiones españolas que concentran las subestaciones con una mayor capacidad de absorción de generación eléctrica y esto hace que los solares cerca de estas subestaciones sean más atractivos para instalar un parque fotovoltaico, como también un data center.

 

Pero estas no son las únicas regiones atractivas desde el punto de vista de capacidad eléctrica. El Plan de desarrollo de la Red de Transporte de Energía Eléctrica Período 2021-2026, elaborado por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, analiza que regiones concentrarán más proyectos de generación de renovables en los próximos cuatro años. Aragón (4.365MW) y Castilla y León (3.720MW), en energía eólica, y Andalucía (4.782MW) y Extremadura (3.894MW), en fotovoltaica, son las comunidades donde se espera un mayor repunte de instalaciones de energía renovable.

 

 

 

 

Teniendo en cuenta la estrategia que apunta el Ejecutivo en el informe, que pasa por maximizar la utilización de las instalaciones existentes, así como ampliar las subestaciones existentes frente a nuevas subestaciones situadas en nuevas ubicaciones, las zonas donde está planeado una mayor instalación de nuevos parques renovables pueden verse más beneficiadas en cuanto a ampliaciones de capacidad eléctrica en sus subestaciones.

 

Otro factor capital para que un terreno sea objeto de deseo en el mercado de data centers es la proximidad a la red de conexión a internet, llamadas coloquialmente autopistas de datos. Según el estudio El mapa de interconexión del Sur de Europa elaborado por TeleGeography, la expansión de los centros de datos, la creciente presencia de operadores en la nube, los nuevos cables submarinos y los puntos de intercambio impulsarán la Península Ibérica como ecosistema de interconexión estratégico.

 

Según el estudio, desde 2016, el ancho de banda en España ha crecido a pasos agigantados. Barcelona ha aumentado su ancho de banda un 35% en los últimos cinco años y ya alcanza los 5 Terabit por segundo (Tbps). Madrid, por su parte, ha crecido un 18% durante el periodo, con casi 15 Tbps, donde destacan sus conexiones con el norte de África, que representan casi un 10 % de la conectividad internacional de la capital. También está aumentando la capacidad entre Madrid y el continente americano. Estos factores sitúan las dos grandes ciudades españolas como ubicaciones clave para la instalación de centros de datos.

 

 

 

 

Pero en el capítulo del acceso a las autopistas de datos también aflora otro factor: los cables submarinos. En la actualidad, el 98% del tráfico global de Internet circula a través de estos canales. En la España continental, Andalucía es la comunidad que cuenta con un mayor número de puntos de conexión a las líneas submarinas, repartidos entre Chipiona, Conil, Rota, Zahara de los Atunes, Traifa, La Línea, Torreguadiaro, Playa de la Ribera y Estepona. En el País Vasco se ubican tres puntos de conexión en Bilbao; Cataluña cuenta con puntos de acceso en Barcelona y Gavà. Por último, hay otro nodo de conexión submarino en Valencia.

 

José Friebel apunta que otro condicionante a tener muy en cuenta a la hora de decidir la ubicación de un data center es que cuente con profesionales especializados en su área de influencia. El director general de DataCenter Dynamics subraya que España cuenta con un capital de trabajadores del sector importante y, de hecho, apunta que este factor ha impulsado la llegada de grandes compañías tecnológicas en los últimos años.

 

Aunque resulta complejo localizar estos perfiles profesionales, en los últimos años se han consolidado complejos tecnológicos donde se alojan diversas compañías del sector, además de centros de formación específica. El distrito 22@ de Barcelona, el Málaga TechPark de Málaga o, más reciente, el Madbit de Madrid, son ejemplos de ecosistemas que sirven como grandes centrifugadoras de estos perfiles profesionales.

 

Por lo tanto, los territorios españoles que combinen estos tres factores, capacidad de generación y distribución eléctrica, cercanía a autopistas de datos y suma de talento especializado, tienen las mejores cartas para concentrar gran parte de las inversiones de un sector que, según Spain DC, captará alrededor de 7.000 millones de euros en España en los próximos cuatro años.