Evernest empieza a cerrar operaciones de más de tres millones, impulsadas por capital mexicano

“Estamos empezando a cerrar operaciones por importes muy altos, por encima de los tres millones de euros, ya que los mexicanos compran viviendas muy grandes”. Así lo explica Óscar Larrea, vicepresidente senior de Evernest en España, en declaraciones a EjePrime. El directivo señala que “los clientes de ese país se distinguen de otros perfiles de compradores, como por ejemplo los venezolanos, por la superficie de las propiedades que les interesan”. Además, adquieren pisos para vivir (o pasar largos periodos de tiempo) pero también para invertir.  

Esta proptech de origen alemán, trabaja principalmente en cuatro ubicaciones prime de Madrid (Chamberí, Centro, Salamanca y Retiro), a las que pronto se sumará Chamartín. El directivo destaca que el 80% de los clientes que compran propiedades por más de un millón de euros suelen ser latinoamericanos (sobre todo mexicanos), mientras que por debajo de esa cantidad suelen ser españoles.

Precisamente, esas áreas de la capital no experimentarán a medio plazo bajadas de precios (y sus niveles arrastran toda la oferta que tienen alrededor), según prevén en Evernest. Larrea destaca: “Antes de la pandemia, el metro cuadrado estaba entre 8.000 y 12.000 euros, pero ahora se mueve entre los 12.000 y 15.000 euros. Y no van a bajar ni moderarse, porque la demanda sigue siendo superior a la oferta”. El ejecutivo añade: “El flujo que hay ahora es de mexicanos, cuyo país de origen tiene una situación socioeconómica estable, con el nuevo gobierno de Claudia Sheinbaum (del mismo partido que el expresidente López Obrador)”. 

Evernest empezará próximamente a trabajar en otros puntos del mercado español: “Queremos consolidarnos en Madrid y, en un plazo de un año y medio, abrir oficinas en capitales o en principales ciudades donde nos interesa estar con fondos propios: como Barcelona, Valencia, Málaga, Marbella, y las zonas más prime de Baleares y Canarias”. Y añade: “En el resto de áreas, probablemente, creceremos a través del programa que acabamos de arrancar con partners, similar al modelo de las franquicias, pero con un canon bajo y bastante flexibilidad durante el primer año. Estamos teniendo muchos contactos con posibles socios tanto en la costa andaluza como en la costa Norte”. 

Larrea asegura que los precios no van a bajar porque la demanda es superior a la oferta

Además de establecerse en nuevas áreas del país, Evernest  pondrá en marcha un nuevo servicio en septiembre. Larrea explica: “Tenemos dos líneas de negocio (venta y alquiler), en las que gestionamos propiedades de obra nueva, segunda mano y de flipping (comprar para reformar y luego vender). A ellas, les sumaremos una tercera línea después del verano que proveerá servicios de forma directa a los multipropietarios (o inversores que se dedican al flipping)”. El vicepresidente de Evernest indica que el mercado ha cambiado en los últimos tres años, ya que “ha aumentado desde un 20% de multipropietarios enfocados en el flipping hasta un 50% de ellos, y este porcentaje está creciendo”. 

Al ser preguntado por la falta de vivienda en España, Larrea explica que el problema es debido a la suma de varios factores: “Es complejo. La poca oferta ha hecho que los precios suban, no se saca suelo y en grandes capitales no se consiguen edificios para rehabilitar, por lo que la oferta seguirá siendo la misma y los precios no van a bajar”. Y apunta: “Las comunidades autónomas tendrán que invertir en vivienda social, apostar por recalificar suelo, facilitar cambios de uso, ya que hay exceso de oficinas y locales comerciales, y definir buenas leyes para regular las licencias turísticas”. Y concluye: “Los gobiernos, sean del color político que sean, deben escuchar a expertos del sector para encontrar soluciones y no sacar parches que consiguen lo contrario a aquello que pretenden”.

En el caso de los jóvenes, el directivo se refiere a una alta tasa de paro y unos sueldos bajos que les dificultan el poder ahorrar para dar una entrada del 20%, así que “las políticas deben ir orientadas hacia el alquiler, aunque los precios también son desorbitados”. Por todo ello, considera: “El Estado y todas las CCAA deben preocuparse de buscar soluciones, hacer una labor social y dejar de señalar a culpables, sin machacar al inversor privado, como están haciendo”.