Árima reestructura su cúpula después de la entrada de nuevos accionistas

Cambios en Árima Real Estate. La socimi cotizada especializada en activos de oficinas en la zona prime de Madrid ha comunicado a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv) cambios en su consejo de administración, después que el año pasado entraran nuevos inversores en el capital de la compañía.

Árima, que cotiza en el mercado continuo, ha nombrado a Pilar Fernández Palacios como nueva consejera dominical. Fernández Palacios es directora financiera de Asúa Inversiones, brazo inversor del empresario Víctor Urrutia, que se incorporó al capital de Árima a finales del año pasado.

Asúa Inversiones adquirió un 7,9% de las participaciones de la sociedad al incorporar un paquete de 2,26 millones de acciones, con un valor, a precios actuales de mercado, de 17,4 millones de euros. Urrutia es la mayor fortuna de Álava y a través de Asúa es accionista mayoritario de la bodega riojana Compañía Vinícola del Norte (Cvne), además de estar presente en el capital de compañías como Iberdrola o Ence.

Por otro lado, Árima también ha comunicado que Carmen Boyero-Klossner, socia fundadora de la socimi y directora de estrategia y desarrollo corporativo, pasa a ser consejera ejecutiva de la sociedad. Boyero-Klossner formó parte de Axiare hasta que Colonial culminó su compra en 2018.

La directiva estaba integrada en el equipo de Luis Alfonso López de Herrera-Oria, fundador y consejero delegado de Árima, en la que desempeñaba el cargo de directora de relaciones con inversores. Anteriormente, fue analista senior en Lehman Brothers y formó parte de la dirección de estrategia de Swisscom en Suiza.

Asúa Inversiones adquirió un 7,9% de las participaciones de Árima a finales del año pasado

Durante el ejercicio 2022, Árima concentró cambios importantes en su accionariado. Tal y como consta en las cuentas anuales de la socimi, algunos de los inversores que formaban parte del capital de la compañía decidieron liquidar sus posiciones, como es el caso de Morgan Stanley, que ostentaba un 5% de las participaciones, o el fondo británico Pelham Capital, que ostentaba el 10% de las acciones.

En su lugar, afloraron las participaciones significativas de Asúa, junto con las de Torrblas, compañía controlada por Ana Patricia Torrente Blasco, que se hizo con el 5% del capital, y TR Property, fondo británico que controla el 5% de las participaciones. La gestora canadiense Ivanhoe se mantiene como accionista de referencia, con el 20,3% de las acciones, y también siguen en el capital Rodex AM, vinculada a López de Herrera-Oria, con el 3,8% de participaciones, y el fondo Fidelity, con el 3,5%.

Árima anotó 6,2 millones de euros de ingresos en 2022, un 19,2% más que en el ejercicio anterior. Sin embargo, la menor revalorización de activos (15,6 millones de euros menos que en el pasado ejercicio), determinaron un beneficio neto de 10,5 millones de euros, un 60% menos que en 2021.

A 31 de diciembre de 2022, la cartera de Árima estaba valorada en 379,7 millones de euros, repartidos en nueve activos en Madrid, de los cuales seis activos estaban en explotación (60.020 metros cuadrados) y tres se encontraban en proceso de reforma (39.907 metros cuadrados). Aunque el grueso del negocio patrimonialista de la compañía se centra en el alquiler de oficinas, la empresa también mantiene en su perímetro una nave logística de 25.694 metros cuadrados en Guadalix (Madrid).