Housell, objetivo 2021: tercer socio y recuperar facturación pre-Covid
La proptech dirigida por Guillermo Llibre prevé terminar el año con una facturación de ocho millones de euros y alcanzar la rentabilidad en 2022.
20 may 2021 - 05:00
Housell abre nuevas vías para esquivar el impacto del Covid-19. La proptech propiedad de los fondos Cerberus y Aviv, controlada a su vez por el grupo alemán Axel Springer, prevé recuperar los niveles de facturación y actividad prepandemia este año y alcanzar la rentabilidad en 2022, según ha explicado Guillermo Llibre, consejero delegado de la compañía, a EjePrime.
“La compañía todavía está en ciclo de crecimiento”, añade el directivo. En 2019, Housell facturó ocho millones de euros, mientras que en 2020 ingresó seis millones de euros, debido al impacto de la pandemia. “Iniciamos el año con buen ritmo para facturar entre diez y doce millones en 2020, pero el Covid-19 lo frenó”, sostiene Llibre.
Para lograr catapultar su crecimiento y alcanzar el ebitda positivo, la compañía prevé la incorporación de un tercer socio a su accionariado. El perfil del nuevo propietario de la compañía es “un fondo con experiencia muy clara en real estate que nos pueda ayudar a escalar”, explica Llibre. La empresa se encuentra en conversaciones con aseguradores y bancos.
Tras el impacto del Covid-19, la compañía lanzó una nueva línea de negocio por suscripción bajo el nombre Housell Flex, donde el usuario puede sacar la casa al mercado por 59 euros al mes. Mediante el nuevo servicio de la proptech, el usuario realiza las fotografías y el anuncio de la venta y Housell se encarga de subirlo a los principales portales inmobiliarios y filtrar los compradores.
Housell ha arrancado una nueva línea de negocio por subscripción en 2021
Hasta ahora, con el modelo de negocio clásico de la compañía, el usuario de la aplicación delega la gestión total de la venta. “Actuamos como una inmobiliaria tradicional, pero con la transparencia que da la tecnología”, explica Llibre. “Con la nueva aplicación los usuarios tienen la oportunidad de sacar su casa al mercado y ver su valor”, añade.
La nueva línea de negocio de la compañía está en marcha desde febrero de 2021. “Teníamos miedo de que la herramienta canibalizará la marca, pero nos hemos encontrado con dos tipos de usuarios muy diferenciados: los que quieren vender, que contratan el paquete tradicional, y los que quiere probar, que se decantan por la nueva línea”, sostiene Llibre.
La compañía cerró en marzo con ochocientos usuarios activos, la mitad de ellos en su área de negocio tradicional, y la otra mitad a través de la nueva aplicación. Para la nueva línea, la empresa estima sumar 8.000 clientes hasta final de año y empatar a su principal área de negocio. “Con House Flex queremos ampliar cuota de mercado y ampliar nuestro abanico de servicios”, afirma el directivo.
El año pasado, la empresa abrió la línea de intermediación hipotecaria, pero hasta este año no ha podido iniciar a operar debido a la nueva regulación hipotecaria. “Actualmente supone una línea bastante residual, pero nos ayuda a cerrar el círculo de servicios de compraventa y esperamos que las hipotecas refloten este año”, añade el directivo.