Sareb vende a Procobro préstamos promotor por 1.700 millones de euros

Sareb se deshace de activos. El banco malo ha traspasado un paquete de créditos sin garantía con activos por valor de 1.700 millones de euros a Procobro, que ha ganado un proceso competitivo al que se presentaron dieciséis inversores, según Expansión.

A Sareb le faltan por liquidar activos valorados en 18.787 millones de euros. Esta operación es la única significativa que ha llevado a cabo la entidad para deshacerse de los activos en lo que va de año. El lote cuenta con restos de posiciones de deuda impagada que no disponen de inmuebles como garantía tras haberse ejecutado los préstamos.

Sareb ha estado asesorada en el proceso por Hebert Smith Freehills en la parte legal y por Haya Real Estate, uno de los cuatro servicers que venden sus inmuebles en exclusiva. Procobro ha estado asesorada por Versus Capital.

El banco malo tiene hasta 2027 para desaguar todos sus activos tóxicos. Aunque la cúpula de la Sareb ha admitido que difícilmente podrá amortizar en el plazo los 35.000 millones de deuda avalada por el Estado que le queda por devolver.

Sareb tiene hasta 2027 para desaguar todos sus activos tóxicos

A inicios de año, Eurostat incorporó la Sareb dentro del perímetro de las cuentas del Estado, por lo que obligó a sumar 35.000 millones de euros de deuda pública y más de 10.000 millones de déficit, mientras que el pasado mayo, Jaime Echegoyen dejó la presidencia de la entidad “por motivos personales” tras siete años al frente.

Los esfuerzos de la entidad se centran en recuperar la mayor parte de los inmuebles en los juzgados que hay en garantía de muchos préstamos morosos. Otro de los pilares de su actividad es la venta de obra nueva.

Sareb nació en 2012 para recapitalizar las entidades financieras más afectadas por la crisis financiera de 2008, para lo que adquirió 98.211 activos valorados en 50.781 millones de euros. La entidad tiene el mandato de generar ingresos suficientes mediante la venta y gestión de estos activos para amortizar la deuda emitida al inicio de su actividad, un objetivo que debería cumplir antes de su liquidación, prevista para 2027.