El hotel Penha Longa sopla 30 velas

Penha Longa sopla treinta velas con aires renovados. El hotel portugués ubicado en el Parque Natural de Sintra-Cascais ha realizado un proyecto de reforma de sus habitaciones y suites, coincidiendo con el trigésimo aniversario del resort. Para ello, el hotel ha contratado al estudio londinense de interiorismo Goddard Littlefair.

La reforma se ha centrado en las 187 habitaciones y suites del Penha Longa, además de los pasillos de cuatro categorías como deluxe, deluxe natural park view, junior suite y executive suite. El objetivo de la remodelación ha sido darle un diseño más moderno y elegante al hotel y cubrir las necesidades de todos los perfiles de huéspedes que se albergan en él.

Las reformadas habitaciones de Penha Longa estuvieron a cargo de Goddard Littlefair, estudio especializado en hotelería y residencial. Respetar el contexto histórico y atender al segmento del lujo fueron las directrices bajo las que trabajó el estudio de interiorismo. El paisaje que rodea al hotel sirvió de inspiración a Goddard Littlefair para el nuevo diseño de las suites.

Penha Longa ha reformado sus 187 habitaciones con muebles ‘made in’ Portugal de la marca Época

“Basándonos en influencias locales, incorporamos colores y formas que rinden homenaje a la elegancia y el lujo de épocas pasadas, al tiempo que integramos toques naturales para difuminar los límites entre interior y exterior, reforzando el ambiente de santuario”, aseguran desde Goddard Littlefair.

La paleta de colores se eligió para realzar los tonos del paisaje que rodea al hotel. Para los interiores, se hizo hincapié en tonos suaves y relajantes, predominantemente verdes y beiges, complementados por azules ligeramente más vivos, característicos de la marca The Ritz-Carlton, y también por tonos neutros y pasteles.

La firma Época fue la encargada de aportar el nuevo mobiliario en el hotel, que está hecho íntegramente en Portugal. En su conjunto, el complejo abarca 220 hectáreas, donde se entrelazan la historia de Portugal y el patrimonio cultural de la reserva natural. Desde 1355, la propiedad que hoy alberga este hotel de cinco estrellas operó con diferentes funciones, desde residencia de vacaciones de la realeza portuguesa a incluso el hogar de una familia japonesa.