Quasar se mantiene en rojo en 2022, aunque reduce sus pérdidas hasta 288 millones

Quasar sigue en rojo. La sociedad conjunta de Blackstone y Banco Santander que agrupa la antigua cartera dañada de Banco Popular y es propietaria del servicer Aliseda, anotó un resultado neto negativo de 288 millones de euros en 2022, lo que supuso reducir las pérdidas de 371 millones de euros de 2021, según informa Expansión.

Quasar suma cuatro años consecutivos de pérdidas, que suman un resultado neto negativo de 3.700 millones de euros. De hecho, la compañía sólo ha cerrado en verde el ejercicio de su fundación, en 2018, cuando registró un beneficio de 1.024 millones gracias a plusvalías contables.

Respecto la cifra de negocio, Quasar sumó ingresos por 572 millones en 2022, un 27% menos respecto el año anterior y muy por debajo de las previsiones de la compañía, que en los resultados de 2021 apuntaba a una cifra de negocio de mil millones.

En 2021, Quasar facturó 788 millones, un 5,1% menos que un año antes, por lo que el salto de facturación barajado por la empresa alcanzaba un 35%. Hasta ahora, los ingresos máximos de la compañía se produjeron en 2019, con 947 millones de euros de cifra de negocio.

Quasar sólo ha cerrado en verde el ejercicio de su fundación, en 2018, cuando registró un beneficio de 1.024 millones

En marzo del año pasado, la compañía cerró un acuerdo para refinanciar su deuda, que alcanzaba 6.000 millones de euros. El nuevo crédito sindicado fue liderado por Morgan Stanley y Deutsche Bank y también participaron las estadounidenses JP Morgan y Bank of America.

El pasivo provenía de la creación de Quasar. Para constituir la sociedad, Santander y Blackstone aportaron en 2018 cerca de 3.000 millones de euros en capital y formalizaron un crédito sindicado de 7.300 millones de euros con vencimiento en 2023.

Precisamente esta semana, Blackstone ha cerrado una de las grandes operaciones de financiación en España. Testa Residencial, la mayor socimi residencial de Blackstone en España, comunicó el pasado martes que en su próxima junta extraordinaria, programada para el 25 de octubre, someterá a votación la suscripción de una extensión y modificación de la financiación existente, según la notificación enviada a BME Growth.

La deuda de Testa y sus sociedades vinculadas ascendía a 31 de diciembre de 2022 a 1.672 millones de euros, un 9,5% inferior a la registrada a cierre del ejercicio 2021, cuando la deuda neta se elevaba a 1.848 millones de euros, según las cuentas publicadas por la compañía. La socimi amortizó anticipadamente en el ejercicio 169,3 millones de euros como resultado de varias desinversiones.