Insur reduce sus ingresos un 37% y recorta beneficios hasta junio

Insur recorta su beneficio e ingresos tras los buenos datos del primer trimestre. La socimi ha registrado una ganancia de 2,5 millones de euros hasta junio, frente a los 2,6 millones de beneficio que obtuvo en los primeros seis meses de 2019, según ha notificado la compañía a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (Cnmv).

La socimi asegura que la incertidumbre ha dificultado la emisión y puesta en circulación de nuevos pagarés, impidiendo la renovación de una parte de la financiación del grupo. La pandemia también ha generado en la compañía una reducción de la actividad comercial, un frenazo en las obras y retrasos en la obtención de licencia. Además, la realización de acuerdos sobre el pago de las rentas con los inquilinos supondrá un coste del 1,8% en el ejercicio de 2020.

La socimi facturó 35,3 millones de euros, un 37% menos que en el mismo periodo de 2019, cuando ingresó 56,1 millones de euros. De ellos, 12,3 millones provienen de la venta de edificios, 6,3 millones del arrendamiento de inmuebles, 15 millones de la construcción y 1,6 millones de la prestación de servicios.

Insur facturó 35,3 millones de euros, un 37% menos que en el mismo periodo de 2019

La cifra de negocio de Insur ya bajó en el primer semestre, aunque su caída fue del 9% y no impidió que los beneficios aumentaran un 46,4%. Por su parte, el resultado de explotación se mantuvo estable en mil euros.

Durante este mes, la compañía ha recurrido al Mercado Alternativo de Renta Fija (Marf) para financiarse, y lanzó una emisión de pagarés por importe de cincuenta millones de euros en el marco de su estrategia de diversificación de fuentes de financiación.

En 2019, los beneficios de la compañía cayeron un 12,2% a pesar de aumentar los ingresos un 1,1%. El resultado de explotación de la empresa alcanzo 17,93 millones de euros, en la misma línea que los 17.97 millones de euros con los que cerró 2019.