La vivienda de lujo en Barcelona habla español: el 60% de los compradores son nacionales

El español comienza a recuperar poder adquisitivo, y eso lo nota el mercado residencial prime. En Barcelona, el 60% de los compradores de vivienda de lujo en 2017 fueron nacionales. La propiedad preferida por el perfil español tiene alrededor de 200 metros cuadrados de superficie y un precio de compra que va entre los 500.000 euros y los dos millones de euros.

Desde que se iniciara la crisis económica de la pasada década, la inversión en residencial de lujo la había acaparado el cliente internacional, según datos de la inmobiliaria Barnes.

Por zonas, el 40% de las demandas se dan en la zona del Turó Park; un 20% se concentra en el resto del distrito de Sarrià-Sant Gervasi; otro 20% en Pedralbes; un 10% en L’Eixample y el 10% restante en localidades como Esplugues, Sant Just Desvern, Sant Cugat, Sitges o Sant Andreu de Llavaneres. Las razones por las que el cliente de vivienda prime escoge Turó Park son su ubicación, a escasos metros de la Diagonal y la Plaza Francesc Macià, la calidad de los inmuebles y la comunicación que tiene en materia de transporte, entre otros aspectos.

Turó Park es la zona de Barcelona más demandada por el comprador de vivienda ‘prime’

En cuanto al inversor internacional, en 2018 predominarán los clientes franceses, belgas y turcos, según Barnes España, por delante de otras nacionalidades como la británica, la alemana, la italiana o la china.

Asimismo, el mercado del alquiler, en auge en el último año, también se ha encarecido en la vivienda de lujo debido a la compra de inmuebles como inversión. El boom del alquiler turístico ha generado, según el estudio, una importante problemática para las familias que buscan un inmueble para vivir, puesto que los precios se han elevado hasta grandes cotas. De media, el alquiler prime ha alcanzado rentas superiores a 1.800 euros al mes en distritos como Les Corts, Sarrià-Sant Gervasi, L’Eixample, Gràcia y Ciutat Vella.