Residencial

Urban Campus se consolida en Madrid y apunta a Sevilla, Bilbao, Zaragoza y Portugal

La operadora francesa de coliving prevé llegar a las 250 camas a cierre de 2022 y, a medio plazo, aterrizar en otras ciudades españoles como Sevilla, Bilbao y Zaragoza.

Abel Pujol

21 mar 2022 - 04:58

Urban Campus se consolida en Madrid y apunta a Sevilla, Bilbao, Zaragoza y Portugal

 

 

Urban Campus sigue con su estrategia de crecimiento en el mercado español. La operadora francesa de coliving prevé cerrar 2022 con 250 camas en su cartera, gracias a su crecimiento en Madrid y el reciente aterrizaje en Valencia, y pone el ojo en otras ciudades españolas y portuguesas como Sevilla, Bilbao, Zaragoza, Lisboa y Oporto para continuar con su estrategia de crecimiento en la Península Ibérica.

 

La compañía, que inició sus operaciones en España en 2017, gestiona actualmente dos centros en Madrid, con una oferta conjunta de 120 camas, y recientemente ha anunciado su desembarco en Valencia junto al family office francés Batipart, pondrá en marcha un proyecto de obra nueva localizado en el barrio de Ayora, que albergará 41 estudios y más de doscientos metros cuadrados de zonas comunes.

 

Urban Campus no descarta cerrar más operaciones en la capital en lo que va de año, ya que se encuentra en negociaciones con diversos propietarios, pero también se fija como objetivo aterrizar en Sevilla, Bilbao y Zaragoza a medio plazo, dependiendo de las oportunidades que pueda encontrar en dichas ciudades. En el mismo sentido, Urban Campus espera poner el pie antes de 2025 en Portugal, concretamente en las ciudades de Lisboa y Oporto.

 

“Es cierto que al principio nos enfocamos mucho en estar presentes en Madrid, Barcelona y Málaga, pero ahora mismo creemos que hay otras ciudades con un gran potencial, incluso en otros segmentos del residencial como el multifamily”, apunta Ana Martínez, directora de operaciones de Urban Campus en Iberia, a EjePrime. “Nosotros entendemos el coliving como parte del modelo build-to-rent y, dependiendo de cada momento de la vida de nuestros targets, nos orientamos más a los distintos verticales del sector residencial”, subraya la directiva.

 

 

Para acometer estas nuevas operaciones, Urban Campus confía en conformar alianzas con inversores para que inviertan en el activo para después operarlo. Esta estrategia es la que ha seguido la compañía para llevar a cabo su llegada a Valencia de la mano de Batipart, empresa que también forma parte del capital de Urban Campus después de acudir a la última ronda de financiación de la compañía, el año pasado, en la que consiguió levantar siete millones de euros.

 

“En los últimos dos años nos hemos centrado en crear alianzas con grupos inversores para, en caso de identificar un activo interesante, poder presentarles nuestro business plan y firmar un contrato de gestión del inmueble a medio o largo plazo”, explica Martínez.  

 

Según datos de la compañía, la ocupación en sus dos alojamientos en Madrid rozó el lleno en 2021, situándose en el 95%, y la estancia media de los usuarios se situó en los doce meses. El perfil habitual de clientes de Urban Campus son trabajadores autónomos o de empresas multinacionales, tanto nacionales como internacionales. La compañía no acepta a estudiantes en sus centros, por lo que la media de edad de los usuarios se sitúa entre los 32 y 37 años.

 

“Hay una demanda brutal de coliving en Madrid, que supera ampliamente la oferta; hemos observado en los últimos meses que los usuarios que vienen a la capital ya lo hacen con la idea clara de instalarse en un coliving, descartando otras opciones, como el alquiler tradicional, de hecho, tenemos 350 personas en lista de espera para cada uno de nuestros espacios”, apunta la directora de operaciones.