Distrito 22@: inversiones récord y demanda al alza en el barrio ‘de moda’ de Barcelona
La zona, cuya reconversión comenzó en 2000, recibirá próximamente a compañías como Hewlett Packard, Amazon o Hawkers, que serán vecinos de Privalia, Mediapro, Indra o Schibsted.
17 may 2017 - 05:00
Lentamente, pero sin interrupción, el invento urbanístico del 22@, lanzado en el año 2000 por el Ayuntamiento de Barcelona, se convierte en una realidad como barrio de oficinas con un alto componente tecnológico e innovador. Privalia, Yahoo!, Mediapro, Microsoft, Sanofi-Aventis, Groupalia, Capgemini, Schneider Electric, Vistaprint o Indra son algunos de los vecinos del distrito, en el que la que la superficie de oficinas comienza a escasear.
Según un informe de Cushman&Wakefield, la contratación de espacios se mantuvo en los dos últimos años en 76.000 metros cuadrados, concentrando en 2016 una cuarta parte de la superficie absorbida en Barcelona. Y, mientras aumenta el interés de los operadores (Amazon, Hewlett Packard o Hawkers serán algunos de los próximos en apostar por el distrito), los inversores también se vuelcan por esta subzona de la capital catalana, con un récord inversor de 930 millones de euros en 2016.
La clave de este interés, la rentabilidad media de la zona, que se sitúa entre el 4,5% y el 5%, superando los ratios del distrito financiero de Barcelona, donde en el primer trimestre de 2017 se situaron en el 3,5%.
“La consolidación como zona de oficinas es ya una realidad gracias a la apuesta por parte de la empresa privada y el sector público”, apunta Cushman&Wakefield. Con un dinamismo creciente, el 22@ sumó el pasado año 21 operaciones, con la llegada de empresas como Atos Origin, Schibsted o Criteo o entidades públicas como Eurecat.
Esta antigua zona industrial de Barcelona interesa, especialmente, a demandantes de grandes espacios de oficinas (a partir de 1.500 metros cuadrados). No obstante, buena parte del suelo disponible no está habilitado para oficinas (las 115 manzanas del distrito tienen 700.000 metros cuadrados potenciales, de los que 243.000 están ubicados en suelo finalista) y la oferta llega a un ritmo similar al de la demanda.
Amazon, Hewlett Packard o Hawkers son algunas de las empresas que se instalarán próximamente en el distrito
Actualmente el distrito suma 70.000 metros cuadrados en construcción y 30.000 en rehabilitación, mientras que la disponibilidad es de sólo 64.000 euros, que equivale al 8% de la superficie total. En primeras calidades, la tasa de disponibilidad baja al 6%. “El potencial de crecimiento de stock es notable y, de completarse todos los proyectos, el parque de oficinas de este submercado llegaría a duplicarse”, apunta la consultora.
El impulso de nuevos proyectos de edificación será clave para el desarrollo del distrito en los próximos años, así como para la evolución de las rentas, que en 2016 aumentaron un 8%. Más allá de 2019, las rentas tenderán a subir si no arrancan más proyectos de los que hay en marcha, mientras que se estabilizarán en caso contrario, según Cushman&Wakefield.
Hoy, el 22@ alberga a más de 8.800 compañías que dan empleo a 93.000 trabajadores. No obstante, la falta de equipamiento comercial y la baja oferta de restauración son evidentes en algunas zonas del distrito. A esto se le suma la falta de vivienda, una circunstancia que el Ayuntamiento de Barcelona, a través de la comisión municipal del 22@, podría combatir con cambios en la planificación urbanística.
La disponibilidad de oficinas se sitúa en el 8% y sólo hay 100.000 metros cuadrados nuevos en construcción o rehabilitación
David Martínez, coordinador de la comisión, señaló a El Periódico la visión del consistorio para la “segunda etapa” del 22@: un Silicon Valley barcelonés, pero “sin renunciar a generar ciudad”.
Nombres propios
Mientras el distrito replantea su futuro, el 22@ no deja de dar la bienvenida a nuevos vecinos de renombre internacional. Uno de los próximos en llegar será la multinacional estadounidense Amazon, que ha sellado el alquiler de 13.000 metros cuadrados en un edificio del distrito.
Spaces también ha apostado por el distrito para crear uno de sus espacios de coworking, ocupando 3.000 metros cuadrados de un inmueble compartido con compañías como Hewlett Packard o Hawkers.