Siri, Alexa y sus amigos, ¿qué es la domótica y cómo puede transformar el ‘real estate’?

¿Qué atrae el proptech? ¿Para qué sirve? ¿Quiénes son sus protagonistas, los principales players que han seducido a la generación milllennial? ¿Por qué se miran y compran pisos a través de una pantalla, se toman decisiones a través del big data y se invierte en una casa para después venderla junto a otros cientos de internautas? ¿Qué beneficios y qué cambios conllevará la digitalización del sector inmobiliario en España? EjePrime realizará a lo largo de las próximas semanas una serie de reportajes que abordarán la revolución de la tecnología 4.0 en el real estate, tratando de manera pormenorizada las distintas líneas de negocio que se han desarrollado ya en el sector, pero también de las que están por llegar.

El ciudadano español tendrá cada vez menos cosas que hacer en casa. Mientras siguen disminuyendo las horas que se pasan en el hogar, el real estate aumenta su oferta para que la casa siga su día a día, incluso cuando esté vacía. El objetivo de la domótica es “entender las necesidades de los clientes y preparar soluciones personalizadas de forma sencilla, fáciles de instalar y utilizar”, según describe Domoticus, una de las catorce proptech que forman parte de este sector de las start ups del inmobiliario español.

También existen en España empresas que crean sistemas para partners que después los instalan en las viviendas. Este es el caso de Loxone, una empresa austriaca nacida en 2009 que vende a instaladores ingenieros su producto. Con esta línea de negocio, la proptech centroeuropea ha crecido cerca de un 40% en España, con una facturación que superó los dos millones de euros en 2017. “Actualmente, tenemos 318 partners”, explica a EjePrime Meritxell Esquius, directora de marketing de Loxone en España a EjePrime.

El grupo facturó el pasado año 57,5 millones de euros en todo el mundo, un 55% más interanual, con las ventas en el centenar de países en los que está presente. Su cartera acumula más de 10.000 partners, a los que le forma con su concepto de smart home, con el que el cliente “puede tener el control de la calefacción y las persianas o, de lo contrario, automatizar la casa con funciones integradas de audio y carga del coche eléctrico”, asegura la compañía. La previsión de la compañía para 2018 pasa por crecer un 60%, lo que atestigua la buena senda de este segmento del proptech.

Ya hay proptech que realizan el círculo completo de la domótica en la vivienda, desde el desarrollo del sistema hasta la instalación y posterior supervisión

El modo de lograr esta integración de los diferentes servicios de domótica en un solo sistema se le denomina miniserver. “Es el núcleo de la casa, el que se comunica con los diferentes dispositivos y sistemas para aportarles inteligencia y coordinarlos”, explican desde Loxone, que tiene su cuartel general en España en Artés (Barcelona).

Cabe destacar que la compañía austriaca cuenta con cursos de formación en Barcelona y Madrid, previo pago de 1.228 euros más IVA, para sus partners que luego quieren entrar en su red nacional. “Después, cuando nos entran pedidos, derivamos a nuestros clientes a uno de nuestros socios atendiendo a la zona y al servicio que se demanda”.

En el caso de Domoticus, start up afincada en Arbúcies (Girona), la integración de la domótica en la vivienda es completa. Desde la programación y diseño del material hasta la instalación y posterior supervisión de los sistemas, la proptech se ocupa de todo.

La compañía ha realizado ya una decena de proyectos en diversas viviendas unifamiliares, inmuebles de apartamentos turísticos y hoteles.

La domótica llega a la oficina
Aunque la presencia de la domótica está más extendida en el sector residencial, los amigos de Siri también han llegado a las oficinas. Así, Axiare estrenó el pasado año a Virto, un asistente virtual para sus edificios de oficinas en el que ha invertido seis millones de euros.

Este sistema está basado en un desarrollo tecnológico propio creado por Axiare I+d+i, el laboratorio de innovación 100% propiedad de Axiare Patrimonio, en colaboración con la consultora global de innovación tecnológica Opinno.

Axiare estrenó en 2017 a Virto, un asistente virtual para oficinas desarrollado por la socimi y Opinno

Además, otra proptech que está desarrollando la tecnología para aplicarla a las oficinas es Citibox. Esta compañía española instala sus taquillas inteligentes en los edificios de oficinas para facilitar la recepción de los paquetes que a diario llegan a los lugares de trabajo sin necesidad de que el receptor esté presente.

Sus boxes han seducido ya a empresas como Coca-Cola o Schibsted (dueño de Fotocasa), y a socimis como Merlin y Colonial. Además, el objetivo de la compañía es ampliar sus tentáculos al sector residencial con contratos firmados ya con promotoras como Aedas Homes y Vía Célere.