El Gobierno retrasa la aprobación de la nueva Ley de Vivienda que regulará los precios del alquiler
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana prevé llevar al Consejo de Ministros de finales de febrero la ley que regulará los alquileres.
31 ene 2021 - 19:15
Retraso en la Ley de Vivienda que prepara el Gobierno. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana sigue perfilando la norma y ha modificado el calendario inicialmente previsto, que recogía aprobarla a finales del pasado enero. Ahora, el departamento que dirige José Luis Ábalos seguirá redactando la ley hasta mediados de febrero para llevarla, después, al Consejo de Ministros. La norma regulará previsiblemente los precios de la vivienda en alquiler.
A finales del pasado octubre, Psoe y Unidas Podemos acordaron llevar la Ley de Vivienda al Consejo de Ministros en un plazo máximo de tres meses y al Congreso de los Diputados en un máximo de cuatro meses, con el fin de “limitar” y “eventualmente bajar”, los precios de alquiler en zonas de mercado “tensionadas”. Este acuerdo entre los dos partidos del Gobierno motivó que Unidas Podemos retirara la enmienda que, junto a otros grupos parlamentarios, había presentado a los Presupuestos de 2021 para limitar los precios del alquiler.
El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha defendido que el control de los precios de alquiler se va a llevar a cabo “oyendo a todos los agentes, organizaciones sociales, administraciones públicas y al sector privado”. Pero Unidas Podemos quiere ir un paso más allá y reivindica que la próxima Ley de Vivienda movilice también la vivienda vacía propiedad de los grandes tenedores y les fuerce a sacarla al mercado para incrementar la oferta de alquiler social en favor de las familias vulnerables.
Por otro lado, la semana pasada, el director general de vivienda y suelo del Ministro, Francisco Javier Martín, se reunió con el director general de la Agencia Negociadora del Alquiler, José Ramón Zurdo, y su consejero delegado, Manuel Romillo, para trasladarles un mensaje de tranquilidad y asegurarles que la futura ley no será perjudicial para el sector, que ha mostrado bastante recelos al respecto.